Este bizcocho de nata es especialmente fácil y muy sencillo de hacer. Es perfecto para cualquier ocasión, en especial para desayunos y meriendas. Tiene una textura muy suave y esponjosa que encantará especialmente a los pequeños de la casa.
Ingredientes para 6-8 personas
- 200 mililitros de nata líquida para montar
- 3 huevos
- Ralladura de 2 limones
- 200 gramos de azúcar
- 300 gramos de harina
- 1 sobre de levadura química (polvo de hornear)
- Mantequilla para untar el molde
En un recipiente batimos bien los huevos con el azúcar. Vamos batiendo a medida que añadimos cada huevo y volvemos a batir una vez estén incorporados los 3 huevos, para mezclar bien los ingredientes.
A continuación se incorpora la nata y seguimos batiendo la mezcla.
El siguiente paso es agregar la ralladura de los 2 limones. Removemos bien para que se integre bien con la mezcla.
Es importante tener en cuenta que debemos rallar solamente la parte externa del limón (la amarilla) porque la parte blanca aportará un sabor amargo al bizcocho,
Por último añadimos la harina, tamizándola con un colador grande, poco a poco, mientras seguimos removiendo. La harina tamizada aportará una mayor esponjosidad al bizcocho.
Cuando esté ya incorporada la harina solo nos queda agregar la levadura química. Una vez esté incorporada la levadura y la harina, removemos bien hasta conseguir que la mezcla esté suave y sin grumos, con todos los ingredientes bien integrados.
Untamos un molde con mantequilla, lo espolvoreamos con harina y vertemos en él la masa.
Finalizamos la preparación introduciendo el molde en el horno (previamente calentado a 180 grados) durante unos 25 minutos.
Comprobamos si está bien cocido el bizcocho pinchando con una aguja o palillo. Si sale seco, apagamos el horno, retiramos el bizcocho, esperamos a que se enfríe un poco y lo desmoldamos. Para que salga con mayor facilidad podemos pasar una espátula o cuchillo por los bordes para despegar el bizcocho del molde.
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